De la Inteligencia Artificial a la Bioeconomía: Cómo anticiparse a los cambios que marcarán la agenda sostenible

El 2025 pinta como un año decisivo para el avance de la sostenibilidad en las organizaciones. Aunque diversas normas y recomendaciones aún no son obligatorias en Colombia, la Superintendencia de Sociedades ha dejado claro que la exigencia de reportes no financieros y estrategias ASG (Ambientales, Sociales y de Gobierno corporativo) está a la vuelta de la esquina.

Durante nuestro último webinar, exploramos las tendencias clave que todo líder empresarial debe considerar para no quedarse atrás:

Crecimiento de la regulación y la rendición de cuentas

A nivel global, surgen cada vez más normas y marcos de reporte (GRI, SASB, IFRS S1 y S2) que buscan alinear la información financiera con la no financiera. Aunque en Colombia todavía no sea obligatorio, todo apunta a que para 2025 las empresas deban presentar reportes de sostenibilidad junto a sus estados financieros.

ODS como hoja de ruta

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) siguen siendo la brújula para integrar planes ambientales, sociales y de gobernanza. Adoptarlos no solo mejora la reputación ante grupos de interés, sino que ayuda a establecer metas claras: desde la mitigación del cambio climático hasta la reducción de la desigualdad.

Inteligencia Artificial y análisis avanzado

Soluciones como ChatGPT u otras IA están marcando una nueva manera de recolectar y procesar datos de sostenibilidad, facilitando la creación de indicadores, la medición de riesgos y la identificación de oportunidades. Esto agiliza la toma de decisiones y reduce errores en la gestión de grandes volúmenes de información.

Transición energética y bioeconomía

Temas como la resiliencia climática o la sustitución de materias primas son prioritarios. El aprovechamiento de la biodiversidad (bioeconomía) y la adopción de energías renovables permiten a las empresas crear nuevas cadenas de valor, prepararse ante regulaciones futuras y, sobre todo, innovar en productos y servicios.

Materialidad y doble materialidad

Ya no basta con medir el impacto financiero de los riesgos. La doble materialidad examina también cómo la actividad empresarial afecta al entorno social y ambiental. Con ello, la sostenibilidad se vuelve parte esencial de la estrategia de negocio.

En suma, quienes integren estas tendencias –desde la IA hasta la bioeconomía, pasando por la medición de doble materialidad– estarán un paso adelante para responder a inversionistas, consumidores y autoridades. El 2024 será un año de oportunidades para las empresas que asuman con liderazgo el cambio hacia un modelo de negocio más responsable y competitivo.

¿Estás diseñando una estrategia de sostenibilidad que aproveche la inteligencia artificial, la transición energética y la bioeconomía, o aún esperas a que la normativa sea obligatoria para dar el siguiente paso hacia el futuro sostenible?